El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes 31 de marzo el Proyecto de Ley de los Presupuestos Generales del Estado para 2017 en el que, tras las negociaciones mantenidas entre el Partido Popular y Ciudadanos, se excluye la subida impositiva a las bebidas azucaradas que el Gobierno incluía inicialmente en la propuesta que presentó el ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro en el Consejo de Ministros del 2 de diciembre de 2016. Así lo confirmó el jueves 30 de marzo en rueda de prensa el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, al manifestar que “no habrá más impuestos”, de lo que se desprende que no se incluirá un nuevo gravamen para las bebidas azucaradas, ni sobre los hidrocarburos, si bien, en la comparencencia del Gobierno ante los medios tras el Consejo de Ministros, no se ha hecho mención específica a ello ya que, según ha declarado el portavoz del Gobierno, Iñigo Méndez de Vigo, “los detalles se presentarán el próximo martes”.
Asimismo, en sus declaraciones del jueves, Rivera confirmó que “no se toca el IRPF otra vez y no se vuelve a subir el IVA”, además de anunciar “la vuelta al IVA reducido en el ámbito cultural”, lo que supone una bajada del IVA de los espectáculos en directo, del actual 21% al 10%.
En su propuesta original el Gobierno incluyó como proyecto de ley, un impuesto sobre bebidas carbonatadas y azucaradas, “por un motivo de salud”, tal como afirmó Montoro, y “cuya figura cada vez es más frecuente en nuestro entorno y ya lo tienen países como Francia, Noruega, Dinamarca o Hungría”. Sobre el montante que supondría la nueva recaudación, el ministro señaló que “nuestra estimación sería para 2017 de unos doscientos millones de euros en bebidas azucaradas”.
FIAB: “Siempre hemos mantenido que una subida de impuestos era una medida desacertada, por lo que el hecho de que no se produzca es una buena noticia”
Desde el primer momento, las diferentes organizaciones representantes de la cadena agroalimentaria alertaron sobre los efectos negativos de “los impuestos especiales, que afectarían directamente al ciudadano y retraerían el consumo”. Así, la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB) mostró durante su Asamblea General Ordinaria del 15 de diciembre su “desacuerdo con las tasas impositivas que graven el consumo”, solicitando al Gobierno “una reflexión más profunda en la convalidación del Real Decreto-Ley 3/2016, de 2 de diciembre, por el que se adoptan estas medidas en el ámbito tributario”.
Tras conocerse que las últimas negociaciones políticas han dado como resultado la marcha atrás para la inclusión de este gravamen en los Presupuestos Generales del Estado, fuentes de FIAB han manifestado a Dulces Noticias… y algo más que, “nuestra postura ha sido en todo momento la de apostar por que no haya una subida impositiva, que afectaría a la competitividad de un sector estratégico para la economía española como es el de alimentación y bebidas”. “Siempre hemos mantenido que una subida de impuestos era una medida desacertada, por lo que el hecho de que no se produzca es una buena noticia”, concluyen.
Por su parte, diferentes empresas del sector de bebidas refrescantes consultadas, prefieren remitir su opinión de forma consensuada a la Asociación de Bebidas Refrescantes (Anfabra), que también se manifiesta en la misma línea que la Federación, afirmando que “estamos en contra de una subida de impuestos, tal como hemos venido manifestando en los últimos meses, por lo que si ello no se produce, nos parece estupendo”. La patronal ha recordado en reiteradas ocasiones que “nuestra industria ha demostrado siempre su compromiso con el diálogo y la búsqueda de soluciones. El sector viene impulsando voluntariamente la reducción del contenido de azúcar puesto en el mercado en estas bebidas, reducción que ya ha alcanzado un 23% en los últimos 10 años. Además hay versiones sin azúcar y sin calorías (el 25% del total)”.
Otras compañías fabricantes de bebidas como Teseo afirman que la exclusión del impuesto de bebidas azucaradas “es una magnífica noticia. No era justo que se creara un impuesto sobre bebidas refrescantes azucaradas. Si este tema es tan preocupante, se debería plantear sobre todos los productos con contenidos de azúcar en sus ingredientes”.
Respecto a la futura posible implantación de este impuesto en los próximos presupuestos, en Teseo realizan un paralelismo con “la espada de Damocles, que la tenemos encima. Debemos luchar para que no se penalice a las bebidas refrescantes y para que se haga un estudio profundo sobre todos los productos de consumo”. De igual modo, señalan que “los consumidores son los que marcan las tendencias, estas se derivan hacia artículos Zero y referencias adaptadas a la gente joven. Las empresas van a seguir estas nuevas preferencias de los consumidores”.
La entrada en vigor del gravamen en Cataluña se retrasa
Donde no ha sido posible poner freno a este nuevo impuesto ha sido en Cataluña donde la norma se aprobó el 22 de marzo, previendo su entrada en vigor el 1 de abril. Ante ello, ocho agrupaciones representantes del sector de alimentación, distribución y hostelería solicitaron un aplazamiento de la entrada en vigor de este impuesto. Ante la petición, el Gobierno Catalán podría retrasar un mes esta aplicación del gravamen, hasta el próximo 1 de mayo.
Anfabra considera que el impuesto en Cataluña discrimina al consumidor catalán, perjudicará a las empresa e incide en que “está demostrado que los impuestos sobre alimentos y bebidas no cambian hábitos ni resuelven problemas de salud”
El documento firmado por las citadas organizaciones (FIAB, ACES -grandes cadenas de supermercados-, AECOC -empresas de gran consumo-; ANGED -grandes empresas de distribución-; ASEDAS -distribuidores, autoservicios y supermercados-; CEDAC -distribuidores de alimentación de Cataluña-; FEHR -Federación Española de Hostelería, y Marcas de Restauración) afirmaba que “las empresas del sector consideran del todo inviables los plazos marcados”, argumentando entre otros puntos que “no han tenido tiempo material de preparar sus sistemas de gestión para poder asumir el importante cambio que supone tener que recalcular y modificar el precio de una gran cantidad de productos antes del próximo sábado”. Para ello, recuerdan que, “las empresas tienen la obligación de hacer la liquidación del primer trimestre de aplicación del impuesto (abril, mayo y junio) el próximo 1 de julio, lo que exige tener todo el sistema listo para repercutir el impuesto este mismo fin de semana”.
También Anfabra ha hecho público un comunicado afirmando que el impuesto “afectará negativamente a los consumidores y empresas catalanas. El consumidor catalán de bebidas con azúcar, sobre el que repercute el impuesto, se verá discriminado frente a otros consumidores en España y en la Unión Europea. Perjudicará más a las empresas que sólo distribuyan y vendan en Cataluña”. Asimismo, inciden en que “está demostrado que los impuestos sobre alimentos y bebidas no cambian hábitos ni resuelven problemas de salud”.
Desde Teseo afirman ante este impuesto que “es una pena que se aplique. Nos servirá de test para comprobar cómo nos afecta, ante una posible aprobación en el resto de España en un futuro. Todo ello, posiblemente, nos obligue a modificar nuestros precios, incluidos los productos que tenemos con P.V.P. recomendado”.
The post Marcha atrás al impuesto sobre bebidas azucaradas appeared first on Sweet Press.